Conócete a ti mismo.

¿Será cuestión cultural o generacional, consecuencia de la revolución industrial o de la vida cotidiana (inmersos en la tecnología, trabajando como máquinas, viviendo de prisa y llenos de preocupaciones, cuentas por pagar y "dead-lines" que cumplir)? ¿será eso lo que nos hace desconocernos, o sentirnos ajenos a nosotros mismos? ¿será por eso que sabemos poco de nosotros y eso nos hace egoístas al desviar irónicamente toda la atención hacia uno mismo? ¿será por eso el "boom" del esoterismo, el new age y las filosofías orientales desde la década pasada?

Somos muchos (me atrevo a decir) los que sabemos o creemos saber poco de nuestra persona. Conocemos a la gente y en ocasiones tan bien que incluso podemos adivinar sus intensiones y reacciones. Pero cuando se trata de nosotros, dudamos: ¿qué haría yo si.......? ¿alguno contesta de inmediato sin dudar a continuación de su respuesta?
En mi caso no es así. Las respuestas no saltan de inmediato (aunque realmente no soy del tipo reactivo, tiendo a pensarme mucho las cosas). Y no creo ser el único que funcione así.

Usamos a los demás como espejo y ese reflejo nubla nuestro juicio: tomamos generalmente sólo eso que halaga la opinión de nosotros mismos.

Es por ese "desconocimiento", ese no saber, que nos atrae escuchar a los demás hablar de nosotros y describirnos a sus ojos. Por eso nos gusta contestar tests (¿es ese el plural?), por eso nos leemos los horóscopos, por eso vamos a que nos lean la mano, el café, las cartas, el aura, la carta astral, los números, los sueños, etc. Por eso meditamos o practicamos yoga, zen, o budismo buscando a nuestro " yo " interno.
Nos encanta que hablen de nosotros como si no estuviéramos ahí, como si se tratase de alguien más. Nos encanta "descubrir cosas nuevas" de nosotros. Es muy cómodo. Hacemos el mínimo esfuerzo por conocernos, y de paso, aseguramos algunos halagos...

¿Sería diferente si no fuera así?