Nostalgia por lo que no es.

Ya lo había mencionado antes ¿no? Todas las películas tienen algo triste o me ponen triste. Ayer ví sólo los últimos 45 minutos de The Lord of The Rings: Return of the King, y me hizo llorar.
Y es que la he estado recordando tanto...

...if ever I was to marry someone...
it would have been her...
it would have been her.

Muchas idas, muchas vueltas.

Esta ha sido una semana rara, llena de cosas extraordinarias, absurdas y como salidas de otra dimensión. Así que el hacer la relatoría de todo esto puede resultar en un post larguíiiisimo. Y que conste que no es ningún tipo de competencia con el último post del Bob que ya ha sido proclamado por algunos como el más largo de la historia. Paciencia jóvenes Padawans.

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EMPEZABA LA SEMANA EN LA ESCUELA, pleno lunes en la mañana, y de la nada había aparecido una pequeña construcción. Ahí, a media escuela, a la mitad del camino, a la mitad del campo visual de todos. Si de por sí, la escuela no es muy grande, con ese armatoste en medio del paso se reduce aún más. Y es que no era más que eso, una construcción digna de ser descrita en palabras antes que imágenes para que se logre dar una idea de tal abominación: cuatro muros de aproximadamente 1metro de ancho por dos de alto unidos sólo por las aristas; esto es como si se dibujara un cuadrado, con un espacio vacío dentro, ye es que de hecho la cosa está hueca por dentro. Así la cosas, se ha empezado a sospechar de su probable fin y funcionalidad (que no son lo mismo): una torre de vigilancia, un faro, un retrete más, una taquilla, un altar con todo y virgen, un centro de información para turistas, una cámara de criogénesis, etc...
Dicen las malas lenguas que terminará siendo un pedestal para una estatua del Papa.
Debería darle pena al arquitecto de la "gran idea".

Antes

Ahora

Bien apuntó Alice al comentar que todas las construcciones de la ENAP empiezan siendo absurdas.

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DESDE HACÍA YA MUCHO que no soñaba nada. Y precisamente el martes por la madrugada que por cuestiones escolares dormí menos de 1 hora en dos tandas, volví a soñar. Incluso mis sueños son crueles conmigo. Soñe con L...., bueno, con un mensaje suyo. El asunto estaba así: Al parecer teníamos una especie de cita, yo llegaba tarde a verla y encontraba un mensaje suyo que decía algo así:

-"La única mujer que estaba dispuesta a darte todo, se fue porque no llegaste" o
"La única mujer que iba a dar todo por ti se cansó de esperarte."-

Uno de los dos, palabras más o menos, el sentido es el mismo.

La sigo pensando. El mismo martes, por la tarde, la recordé nuevamente, o me ayudaron a recordarla con cierta especificidad a partir de una pregunta que, supongo, jamás me hice, y cuya respuesta di basado en hechos.
A lo largo de la semana la recordé, igual, por todo aquello en lo que me hubiera gustado compartir.

Oh, it's the best thing that you ever had,
the best thing that you ever, ever had.
It's the best thing that you ever had,

the best thing you have had has gone away.

Ese mismo martes, pero ya por la noche, nos íbamos de la escuela Alice, Donají, el Javo y yo. Nos sentamos hasta atrás del camión y en algún momento se subió una pareja, ambos se quedaron de pie frente a nosotros, la chica más cerca. Alice vió que la chica en cuestión traía unas galletas en la bolsa de su chamarra y se suponía que yo le quitaría una sin que se diera cuenta, para lo que urdi un plan que consistía en llevar mi mano hacia su espalda (algo así como un punto ciego) y desde allí extraer la galleta.
Y en eso estaba, ya aproximando mi mano, cuando de repente Donají gritó (así, literalmente) : -¡¿ La vas a manosear?!-
Su grito hizo eco en toda la parte trasera del camión. No sé cómo el novio de la chica no escuchó, sino quién sabe cómo me hubiera ido...

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UN DÍA DE DESCUBRIMIENTOS podría llamársele al miércoles. Para empezar Alice llevaba días mostrándonos sus dotes quirománticas (o sea, lectura de la mano), pero ese día en especial, Caro fue a la escuela y llevaba su miniagenda con una guía para leer la mano. Así me enteré de... mmm... ya no recuerdo de qué. Volveré a pedir el manual.
Se suponía que ese día yo iría al cine, ya lo había estado posponiendo por muchos días, pero de alguna forma terminamos Bob, Alice, Caro y yo en la expo de Lezama. Aunque llegamos tarde pudimos verla tranquilamente, y después colarnos por un cafe con galletas que no eran precisamente para nosotros. Salimos pues del museo; Alice se fue a dormir, Bob y Caro iban a caminar, y yo determinado a ir al cine decidí acompañarlos un rato, hasta dar con el complejo cinematográfico.
Pero en el camino se nos atravesó un Sanborn's al que entramos a ya no recuerdo qué, también pasamos a ver las esculturas de Dalí en el atrio de la iglesia de no recuerdo qué santo (uy, no recuerdo varias cosas, tengo problemas de memoria). Luego dije que nunca había ido al "Barrio Chino", y fuimos; toda una decepción: durante el paseo no ví más que 3 chinos, el resto es un montón de mexicanos disfrazados, además es sólo una cuadra donde más bien los comercios parecen estar repletos de toda esa mercancía "Made in China" y refacciones.
Seguimos hasta Balderas (yo aún conservaba la intención de ver una película), pero a la voz de -"Se ve que está barato."-, nos metimos en un local donde había de todo, y cuando digo de todo, es de todo, y efectivamente barato. Ese lugar, y el Waldo's Mart que visitamos justo después, me maravillaron. Son de esas cosas a las que por el simple hecho de existir les encuentras el gusto. Y es que hay cosas que ni te esperas: Bob compró un modelo armable del corazón, Caro y yo salimos con un par de estos:

Caminamos hacia Juárez y nos sentamos en las bancas con Filósofo en mano. Platicamos un ratote dando sorbos a una bebida espirituosa de dudosa calidad, pero barata y mexicana. Nos fuimos de ahí como a las 10pm. Ya no fui al cine.

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HACE MUCHO TIEMPO, por allá por los tiempos de Salinas o Zedillo, un sector de vendedores ambulantes del centro fueron reubicados en dos plazas comerciales: Pino Suárez y San Antonio Abad. Desde ese momento quise saber donde estaba la segunda, porque nunca la veía al ir al centro o al pasar por Pino Suárez-Sn. Antonio-Tlalpan.
El viernes, Bob, que parece ya se adjudicó el puesto de guía de turistas, nos llevó a dicha plaza. Resulta ser un especie de mercado que se extiende en todas direcciones y vende únicamente ropa (de procedencia dudosa) pero baratísima: es posible comprar cualquier prenda, desde pantalones, playeras y sacos, hasta ropa interior y vestidos, por 30 pesos o menos. ¿A poco no es una ganga?
El boletito del RTP sumó 21, y me puse chipil.....

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EN TEPITO, yendo a comprar discos. La verdad es que la idea ya me emocionaba menos que originalmente. Eso de comprar pirata no me late mucho. Además hacia un calor del demonio y yo estaba cansado y mal comido. de cualquier forma compré 4discos, unos a $8 y otros a $5.

Ayer no pasé la noche en mi casa, y ví una película del Mago de Oz donde Dianna Ross era Dorothy y Michael Jackson el Espantapájaros. Está bien loca, se llama The Wiz.

Es horrible querer hablar con alguien sabiendo de antemano que no te contestará.

Me gusta mucho el cine, siempre ha sido una forma de pensar otras cosas, de imaginarme otra vida, otras situaciones, de brindarme explicaciones, de dejarme ir, abandonarme y desaparecer por un rato; estar en lugares más plácidos o al menos más interesantes.
Me siento triste, otra vez.
Y por alguna razón, toda película que veo últimamente, me hace recordar, imaginar, extrañar y llorar. Todas.
Todas tienen algo triste... y otra vez me deprimo.

Necesito otras cosas, no lo que se supone ya tengo. Eso ya no sirve. Es como vivir por rutina, por costumbre. Y es que lo que necesito es llenar ese hueco que me produce la enorme sensación de soledad, o al menos una o varias distracciones para recordarlo menos... Pero como no quiero olvidar-la, posiblemente nada pase, nada cambie.

La escuela está por terminar, tengo planes, pero no sé con seguridad qué es lo que sigue y eso es desesperante, deprimente y casi trágico. Mi única meta constante (si no muero pronto o mi memoria empieza a fallar) es vivir cerca del Centro.
Quizá entonces, quizá algo suceda, quizá...

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Las últimas palabras que han logrado hacer un eco en mi mente han salido no de libros ni cosas así, sino de la vida diaria, de la TV y pláticas con amigas:

1) Comparado con el resto, yo soy casi virgen.


2) Prefiero mal acompañado, que solo.

3) Debe ser difícil intentar hablar con alguien sabiendo de antemano que no va a contestarte.


4)

Mujer: - Queremos cosas diferentes. -
Hombre: - Todos queremos cosas diferentes, y aunque cada mañana nos levantemos con la intención de lograr obtener todo eso que deseamos, no significa que necesitemos todo eso para ser felices.-
Mujer: -¿Qué necesitas tú para ser feliz?-
Hombre: -A ti.-

Otra vez.

"Can you feel this? It's my heart, and it's broken."

Volví a ver Great Expectations, adoro esa película. Triste, cruel y llena de "esos" momentos. Justo como la vida.
Es una película tan verde. Me gusta. O quizá sólo me gusta Gwyneth Paltrow.

No me lastimaron, me hirieron gravemente y me dieron por muerto.

...Look what you've done, you've made a fool of every one
well it seems like such fun until you loose what you have won...

Nada es como se suponía. Y la ciudad, mis actividades, mis recorridos, me lo recuerdan constantemente. Me hacen recordar y me hacen recordar que me olvidan. Otra vez el miedo.
Otra vez No surprises.

...bruises that wont heal.

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Eso de tener que madurar, de crecer, de convertirse en adulto, se va volviendo cada vez más aburrido. Pero no hacerlo, por supuesto, está mal visto. Estúpidas convenciones sociales.


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Por cierto... ¿ya checaron la super-revolucionaria técnica de supervigilancia en el metro? (mmm... muchos super...)


Uno llega, se sube a su pedestal, y bien se puede poner a jugar a "Las estatuas de marfil". Disculpen la foto mal enfocada y movida, es que es artística, jaja (no, la verdad es que la poli no dejaba de verme con cara de "-este tipo segurito trae una bomba-".)

Aunque recién descubrí que también pueden servir como para que un par de polis se echen un diálogo de aquéllos de los que Shakespeare dedicóles a Romeo y Julieta, justo para tirar la onda en su balcón improvisado.

Chequen la pose conquistadora al estilo western.

Casi siempre he sido güero.

Quería escribir un post diferente: sin penas ni glorias. Y como he sentido tanta nostalgia por mi vida a últimas fechas, ahora hago un pequeño recuento de todos los alias que he tenido a lo largo de este poco más de cuarto de siglo.
El primero que recuerdo haber llevado encima es el de Gañas (por una costumbre de mi abuelo de poner sobrenombres a todos sus nietos). Mi otra abuela creo que nunca pudo pronunciar mi nombre o desde siempre lo confundió, así que me llama Amorcito. Cuando nos cambiamos de casa como por cuarta ocasión (larga historia), pasé a ser El Güero, y en la primaria también, o variantes como Wearever 2000. En la secundaria era Charlie Brown, y en la prepa Bart Simpson; pero entre esos dos, cuando jugaba americano me decían Búho.
L.... también me llamaba de una forma especial, pero esa me la guardo; extrañamente, ese ha sido el más largo y más agradable de todos los sobrenombres que he usado.
Dos años estudié medicina, y por ese tiempo fui Lion King. Desde entonces he sido El Extranjero y El Gabacho...

Quería un post diferente, sin penas..., pero no resultó.

Del desvarío.

Por ahora soy todo y soy nada; no se siente como si lo que soy fuera realmente yo. Es casi como un colapso, una convulsión. Nada se define, tampoco yo. Soy como una gran madeja de nervios, abiertos y expuestos a la hipersensibilidad.
Puedo reír hasta llorar, pero eso no es más que una pantalla; llorar sin reír es más sencillo, y de alguna manera, más auténtico.
A pesar de que me siento (otra vez) deprimido, sólo quiero participar en un juego personal de venganza y destrucción: cobrarme todo por las malas.

...this is what you get when you mess with us.

Me estoy cansando de intentar comportarme, de ser buena gente. La gente mala vive mejor, sufre menos y tiene pinta de ser más feliz. Quizá sea sólo cuestión de karma; y en ese caso, el mío ha de estar pesadísimo.

Luego se me juntan un montón de otras cosas en la cabeza y ya no las puedo procesar, se satura mi memoria y olvido uno que otro asunto, incluso cuando se trata de algo reciente. Como manifestaciones esporádicas de un futuro ataque de Alz Heimer.

Una idea extraña se me ha cruzado entre las pocas neuronas que se mantienen intactas, y va llenando los espacios libres de mi mente: Ya es tarde, para todo, ya es muy tarde. Como si a mi edad la vida ya se me hubiera ido de las manos, como si ya hubiera perdido las mejores oportunidades... ¿oportunidades de qué? de lo que sea. Es como si ya nada fuera factible. Y es que en mis circunstancias, resulta más sencillo ver las cosas del lado de lo posible pero no del lado de lo probable.

Ahhhhh, y luego el hastío. Quiero gritar. Sé que de alguna forma me ayudaría, pero no me atrevo, por miedo, quizá el más absurdo de todos mis miedos: no grito por miedo a sonar como "nena" (ja, ¡¡ ridículo !!). Así que lo cambio, me hago a mi mismo un cambalache, y en lugar de gritar, canto; con intensidad y vehemencia, pero quedito.

El aislamiento, el olvido, la soledad, y los instantes depresivos... En fin.

Constantes.

No quiero olvidar. Tomando en cuenta que algunos de esos recuerdos me devuelven la sonrisa por unos instantes. A veces no estoy seguro de cómo recordar: ¿con esperanza o desesperanza?... ¿No quisiéramos todos otra última oportunidad?

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Andar solo de aquí para allá, repitiendo rutinas, acciones, recorridos; repitiéndome a mi mismo, es hartante, aburrido, triste. La extraño de formas tan diferentes.

"We're suppossed to be together."

El otro blog.

Pues abrí otro blog, nada más para publicar fotos de piezas y hacerme el intelectual (ja). Píquenle aquí o en los links de la derecha, ahí, abajito de donde dice O. M. A. R.

Dicen que Dios es el amigo imaginario de los adultos.

A veces quisiera creer con vehemencia en Dios. Que en realidad te ve, te escucha y cosas así. Confiar en que bastaría un par de oraciones significativas hechas fervientemente para que todo se solucionara.
Siento que me voy empequeñeciendo (y a veces ahogándome entre gritos, llanto, angustia y miedos que no han salido aún). Puedes llorar en medio de la gente y nadie lo nota. O quizá si, pero prefieren ignorarlo, o no saben qué hacer. ¿No es eso para reírse? ¿No es eso para rendirse?
A veces regresa a mi, quizá ya al borde del absurdo, el pensamiento de que todo se resolverá, que podría ser como antes.
Reconozco que todo esto tuvo ciertos efectos "positivos" en lo "profesional". Pero lo dije tres, cuatro... diez veces: lo dejaría todo... bla, bla, bla, bla, bla. Uno simplemente toma decisiones.
Por ahí (o sea, en un lugar indeterminado por mi memoria) leí esto:

"Los que se aman se lastiman con la verdad para no destruirse con la mentira"

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Insisto en mi teoría personal (mmm..."mi" y "personal" en la misma frase se siente casi como un pleonasmo; si es que no lo es, segurito está mal escribirlo así) de que la clave de la felicidad radica en encontrar ese algo que te permite conformarte con todo lo demás:

- la rutina
- la ignorancia
- la pobreza
- el desempleo
- el hambre
- los impuestos
- la enfermedad
- los malos gobiernos
- la religión
- la guerra
- la soledad
- la muerte
- etc.


...nobody said it was easy, it's such a shame for us to part
nobody said it was easy, no one ever said it would be so hard...

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Los anónimos han desaparecido.